miércoles, 16 de octubre de 2013

Doce vidas en tu espada.

Voy a partirme el pecho para escribir esto,
así que si quieres,
aprovecha y cuélate dentro..

qué fácil sería tenerte ahí toda una vida

quizás por eso te pido doce,
y quizás por eso debería pedirte unas cuantas más.

Yo por mi parte, sigo sin entender qué has visto tú en mi,
pero sea lo que sea, no dejes de mirarme así.

Porque tiemblo, sé que eres tú porque tiemblo,
porque me imaginé besándote seis veces antes de besarte,
antes de si quiera conocerte.. y porque no te imaginas cuánto llegué
a temer a tus labios entonces.

Sé que eres tú porque existes, porque lates y me paras
el corazón y lo manejas a tu antojo cuando duermes sobre mi pecho.

Sé que eres tú porque desde que tú, mi único miedo son tus miedos
y te juro que ahora envidio a la niña que temía al monstruo de debajo
de mi cama.

Pensar en tus dudas me tambalea la vida,
déjame sacarlas a bailar,
que ya sé que dices que no tengo ritmo
pero es que encanta verte reír.

Porque yo te hice esperar 45 minutos,
pero tú me has tenido buscándote una vida entera
y creo que lo justo va a ser comernos
las ganas antes de que vuelva a salir el tren.

El tren.. qué ganas tengo de volver a cogerlo,
de volver tocarte,
qué ganas de volver a dormir contigo
y despertarme antes solo para verte dormir.

Esa imagen, ésa,
tú soñando y yo mirándote
se ha convertido en la página marcada de mi libro preferido
déjame leerte un rato.
o dos, o tres,
o qué coño,
déjame leerte cada noche.

y es que qué es la vida sino perderla en tu espalda
para luego girarte y volverla a encontrar

(encontrarte)

Te aseguro que intenté no desear besarte
intenté no querer vivir en ese lunar que poco a poco
se está convirtiendo en el centro de mi universo,
pero el viento vino y lo sacó a volar,
y yo no pude sino ponerte la canción más lenta
para hacerte eso que algunos,
llaman..

amor,

ven y dame la mano, que saltar al vacío es llenarme las ganas
de tirarme contigo,
y es que has venido sacudiendo mis mañanas
llevándote por delante todo lo que miren tus ojos azules.

Claro que Madrid tiene playa,
solo que la tiene tu mirada,
y a ti te tiene Madrid,
y eso es una gran putada.

Qué envidia me dan sus calles
qué rabia sus aceras y sus pasos de peatones
ya me imagino al muñequito del semáforo en verde
viéndote cruzar,
poniéndose nervioso
y en rojo otra vez.

unos pocos minutos.

Yo solo te pido dos,
de momento,

...y doce vidas

(pero ese es otro tema)


Como sentir que me sobran cinco sentidos para sentirte,
porque joder, aún no se ha inventado la manera de contemplarte
así como tampoco existen palabras para describirte.

(esto solo es un intento)

Porque te estoy escribiendo esto mirando una fotografía tuya
y aun así
cómo hablar de tu cuello,
de ese perfecto acantilado por el saltar de la mano,
cómo hablar del espacio que separa el lóbulo de tu oreja
de tu clavícula y cómo explicar que dedicaría el resto de mi vida a
besar ese abismo.

Cómo voy a explicar el color de tus ojos
si hasta los mares lo utilizan para sentirte cerca,
cómo voy a explicar el terciopelo de tu piel,
la longitud de tus pestañas,
la manera en la que apagaste el despertador
o esa otra en que lo retrasaste...

cinco minutos más

...y me besaste,

y fueron de repente los cinco minutos más bonitos de toda la historia, y fuiste de repente, mi lugar preferido de todo Madrid..


Eres
mi lugar preferido
donde quedarme a vivir..


Monica Gae.


Twitter: @MonicaGae

No hay comentarios:

Publicar un comentario