Sr. Ministro de Educación:
Desde que Ud asumió la cartera de Educación se ha propuesto
el desguace sistemático del sistema público de educación. Y lo ha hecho con
medidas que son injustas desde el punto de vista social porque agudizan las
desigualdades, e ineficaces desde el punto de vista económico porque confunden
inversión con gasto. El Real Decreto-ley 14/2012, aprobado sin ningún proceso
de deliberación, supone un cambio radical de modelo en la concepción del
sistema educativo. Hasta la publicación de este decreto, nuestro sistema
educativo venía sustentándose en el principio de igualdad de oportunidades. El
RDL ignora este principio y lo sustituye por criterios exclusivamente
meritocráticos y tecnocráticos, en aras a una supuesta eficiencia. Como
sociólogo, Ud. sabe que el mérito no se explica sólo por el esfuerzo
individual, sino que depende en buena parte de las condiciones de origen –de
las ventajas o desventajas de partida– de los sujetos. Por eso, este decreto
castiga a las familias con menos posibilidades económicas, penaliza severamente
al profesorado precarizando sus condiciones laborales, y da legitimidad a un
programa sistemático de deterioro de la red pública de educación.
Las medidas de recorte que aplica su Ministerio harán caer
la inversión en educación del 4´9% -una cifra que ya estaba por debajo de la
medida europea- al 3´9% del PIB. Este recorte no garantiza una mayor calidad
educativa, sino que supone una grave lesión a uno de los derechos sociales –el
de la educación– que configuran el estado del bienestar. Las “políticas de
austeridad” en las que se basa el RDL suponen que la calidad educativa ha de
ser únicamente para las clases privilegiadas, confundiendo interesadamente
derechos con privilegios.
Las medidas educativas que plantea el RDL amenazan la
equidad del sistema educativo y van a suponer una masificación en las aulas, la
paralización de los nuevos ciclos de FP, el recorte de plantillas, la
precariedad laboral, la privatización de servicios educativos, el aumento de
tasas universitarias, la disminución de becas, la pérdida de derechos laborales
y la obstaculización de la función investigadora. Todo ello supone un retroceso
brutal que no debemos tolerar. La educación es un derecho básico para toda la
ciudadanía reconocido por nuestra Constitución.
Sr. José Ignacio Wert: Usted tiene el dudoso mérito de haber
conseguido provocar –en los escasos meses en que se ocupa de la cartera de
educación– la primera huelga unitaria de la democracia en todos los niveles
educativos. El éxito de esta huelga del 22 de mayo, apoyada por toda la
comunidad educativa, ha sido una clara demostración del rechazo de la
ciudadanía a la política regresiva llevada a cabo por su ministerio. Por eso,
en calidad de máximo responsable del Ministerio de Educación, solicitamos su
cese inmediato.
Consejo del Departamento de Sociología y Antropología Social
de la Universitat de València.
Súmate y firma la petición de dimisión del Ministro de
Educación.
Enlace: Change.org
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